El pajarillo de piedra
Hubo
una vez un pájaro de piedra. Era una criatura bella y mágica que vivía a
la entrada de un precioso bosque entre dos montañas. Aunque era tan
pesado que se veía obligado a caminar sobre el suelo, el pajarillo
disfrutaba de sus árboles día tras día, soñando con poder llegar a volar
y saborear aquel tranquilo y bello paisaje desde las alturas. Pero
todo aquello desapareció con el gran incendio. Los árboles quedaron
reducidos a troncos y cenizas, y cuantos animales y plantas vivían allí
desaparecieron. El pajarillo de piedra fue el único capaz de resistir el
fuego, pero cuando todo hubo acabado y vio aquel desolador paisaje, la
pena y la tristeza se adueñaron de su espíritu de tal modo que no pudo
dejar de llorar. Lloró y lloró durante horas y días, y con tanto
sentimiento, que las lágrimas fueron consumiendo su piedra, y todo él
desapareció para quedar convertido en un charquito de agua.
Pero
con la salida del sol, el agua de aquellas lágrimas se evaporó y subió
al cielo, transformando al triste pajarillo de piedra en una pequeña y
feliz nubecita capaz de sobrevolar los árboles. Desde entonces la
nube pasea por el cielo disfrutando de todos los bosques de la tierra, y
recordando lo que aquel incendio provocó en su querido hogar, acude
siempre atenta con su lluvia allá donde algún árbol esté ardiendo.
Autor.. Pedro Pablo Sacristán
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