lunes, 12 de diciembre de 2011

Un més exactamente desde la última vez que escribí en este rinconcito
sobre mí, sigo enlazando un (lo que sea) con otro y así llevo ya desde
finales de Septiembre, ya estoy saturada, agobiada, cabreada y terminé
por ir de nuevo al médico el viernes, en ello estoy, en tomarme lo que
me envió a ver si de una vez me lo quito de encima.

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Recuerdo que cómo quedaba con Ana mi psicológa en esos momentos, una semana decidí
hacer de tripas corazón y aunque lo pasase mal salir sola a ver hasta donde llegaba.

Así que llegado el día me dispuse a salir, no sin antes ir no sé cuantas veces al baño, tomar un
poquito de agua de azahar y ya irme a la calle.

Iba despacio, animándome yo sola, temblando , sí , temblando y pesándome las piernas, el corazón
desbocado por el miedo pero avanzando paso a paso y yendo hacía donde quería ir, el mar.

Tardé, sí, tardé en llegar, me aseguraba por donde pasaba de las seguridades que me aportaba ese
lugar, taxis, zonas conocidas, calles más bien desiertas o con poca gente y así poco a poco y aunque
me pareció una eternidad llegué a la playa, mi playa.

Cómo me senti??? No podeis imaginarlo, estaba muy nerviosa a la vez que feliz, allí estaba yo por primera
vez, sola , sola después de tantos años sin poder hacerlo, llamé a Ana y le dije ( Sabes donde estoy??? y ella me dijo, sí, en la playa) lo adivinó, sabía que mi gran deseo era ese, que me sentía feliz y con miedo al mismo tiempo, pero el llegar allí yo sola, tardase lo que tardase, con miedo, insegura, despacio, me hizo sentirme la
persona mas feliz del mundo, luego el regreso a casa ya fué otro mundo, pero al ir hacía mi casa , eso, ya hace que vaya con mas seguridad.

Hasta otro ratito.

2 comentarios:

  1. Gracias preciosa. No se puede resumir 42 años escribiéndolo aqui, pero bueno, intento transmitir mi vivencia. Besitos.

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